Aromaterapia en India

Colección de aceites usados en aromaterapia, Kate Ware

En la India, como en otros países del mundo, se ha hecho y se sigue haciendo un uso especial de las plantas para la curación. Esta costumbre tiene miles de años de antigüedad y en la India se sigue practicando, algo que en Europa se abandonó hace tiempo. Gracias que estamos empezando a redescubrir.

Hay textos religiosos antiguos, como el Rigveda, que nos ofrecen fórmulas, invocaciones y usos de muchas plantas. El uso de plantas en la India se hace de una forma religiosa y considera a las personas como una parte integrante de la naturaleza.

Durante miles de años la medicina india se ha basado únicamente en las plantas. Algunas de sus religiones se basan en principios vegetarianos y en el gran conocimiento de las plantas medicinales.

Ya en tiempos del famoso rey Ashoka, se prestó gran atención a las plantas medicinales así como a su cultivo y recolección.

Actualmente las fórmulas médicas de la India forma parte de su medicina ayurvédica, y sus plantas medicinales han llegado a ser famosas en todo el mundo. La vida moderna actual busca, entre otras cosas, nuevas maneras de reencontrar la unión entre el hombre y la naturaleza.

Una botella de perfume de vidrio con palitos de fragancia decorada con flores, Marco Verch

Como plantas importantes podríamos citar la pimienta el cardamomo, el jengibre, el clavo, el sándalo, el cannabis, el aceite de sésamo, el áloe, etc. Muchas de estas plantas se usan en aromaterapia en forma de aceites esenciales. Estos aceites esenciales tienen múltiples propiedades desde aspectos estimulantes hasta afrodisíacos, entre otros.

Hay que destacar que destilar la esencia pura de las plantas es un proceso largo y en muchas ocasiones caro. Para hacernos una idea del proceso se puede decir que para conseguir un litro de aceite de esencias de rosas haría falta una tonelada de rosas.

Cuenta la leyenda que el príncipe mongol Jenhagir, llenó todos los canales de su palacio con rosas el día de su boda. El agua se impregnó del perfume y del aceite aromático de las rosas, e impresionó considerablemente a su futura esposa.

Así pues, el príncipe ordenó enfrascar ese aceite aromático para que su mujer hiciera uso de él. Hay que decir que el uso de la aromaterapia se usa desde miles de años antes de que se descubriera la técnica de destilar aceites. Y a partir de su descubrimiento se han considerado los aceites esenciales beneficiosos para el cuerpo y para el espíritu.

Se han utilizado para prevenir y curar enfermedades, así como para conseguir un bienestar general del cuerpo. El gran médico árabe Abu Ali Ibn Sina (Avicena), que vivió en el siglo XI de nuestra era, además de describirnos más de 700 plantas como la lavanda o la manzanilla, muy utilizadas en la aromaterapia actual, fue el que descubrió el método de destilación de los aceites esenciales de las plantas, por lo menos es lo que se cree ya que se han encontrado dibujos de aparatos para destilar muy parecidos a los utilizados actualmente.

Quemador de aceites esenciales utilizado en la aromaterapia, Eggybird

Se han encontrado restos funerarios muy antiguos junto con restos de plantas que probablemente se usaban con fines medicinales. Se sabe que el instinto animal, que ahora tenemos bastante olvidado, o la observación del comportamiento de los animales enfermos y las plantas que comían, ha sido la razón de que el ser humano ha dado siempre gran importancia al poder escondido de ciertas plantas. El conocimiento de ese poder ha formado parte de las personas más sabias de cada tribu. Se sabía que algunos arbustos y plantas que eran arrojados al fuego desprendían aromas que podían sanar, aturdir e incluso alterar ciertos estados de conciencia.

Se sabe que antiguamente se hacía uso de esto de manera ritual para hacer ofrendas a los dioses. Y más recientemente el uso de incienso es práctica habitual en muchos lugares. Se sabe por documentos conservados en papiros, las plantas que utilizaban los egipcios y el uso que hacían de ellas, aunque estos no llegaron nunca a destilar sus aceites. Y ya muchos siglos después se quemaba tomillo y romero en los hospitales franceses, descubriéndose recientemente las propiedades desinfectantes de ambas plantas.

Los griegos también tenían un conocimiento amplio sobre las plantas. Ellos descubrieron que algunas plantas eran estimulantes o relajantes, y empezaron a utilizar el aceite de oliva para absorber todo el olor y las propiedades de las flores y plantas, y usar después ese aceite perfumado como medicina o cosmético. Hipócrates, el padre de la medicina, nos ha dejado en sus escritos una lista de plantas utilizadas en la época como la mandrágora, el opio, la belladona o el membrillo entre otras.

La fragancia de rosas tiene efectos relajantes

La menta tiene efectos estimulantes

El aroma de la mandarina tiene efectos relajantes

Los aceites esenciales que se traían de oriente eran muy apreciados, pero aquí se empezó a utilizar el espliego, el tomillo y todas las plantas aromáticas del Mediterráneo para producir aceites con lo que había en Europa. Hay escritos medievales que nos hablan del agua de lavanda y como conseguir aceites perfumados.

Pero según pasaba el tiempo apareció en la medicina sustancias químicas que irían poco a poco desplazando a las plantas medicinales conocidas. Se empezó hacer uso del mercurio, sustancia que todos sabían que era venenosa. Quienes criticaban su uso fueron despreciados como anticuados y ese uso de sustancias químicas supuso para muchos un éxito financiero y una disminución paulatina del uso de sustancias naturales. Se ha llegado a decir que la quema de brujas que ocurrió en el pasado coincidió con el nacimiento de esta medicina química, ya que las mujeres perseguidas tenían un conocimiento muy amplio sobre la medicina con plantas y no convenía que siguieran aplicando sus conocimientos entre los habitantes de su aldea.

Esto es uno los aspectos más tristes de la historia, ya que la gente pobre disponía de conocimientos médicos que transmitían de unos a otros, y poco a poco les fue arrebatado ese conocimiento. Hoy en día se siguen investigando las drogas sintéticas sobre todo porque es una forma de conseguir algo y poder patentarlo. Las plantas no se pueden patentar y no aportaría demasiados beneficios.

René Maurice Gattefossé, que a principios del siglo XX trabajaba como químico en la compañía de perfumes de su familia, se interesó de una manera muy especial por los aspectos medicinales de los aceites.

Observó que algunos aceites, por si solos, tenían mejores propiedades que los productos químicos a los cuales se les añadían esos aceites. Resulta que un día se quemó y utilizó únicamente aceite puro de lavanda. La curación fue increíblemente rápida, sin infección y sin cicatriz. Esto le animó a seguir investigando y a utilizar el término aromaterapia en todos sus descubrimientos. En el año 1928 publicó un libro con el título de aromaterapia.

Actualmente, los seguidores de la aromaterapia no pretenden crear una guerra entre lo químico y lo natural, pero recalcan que puede haber efectos secundarios en ciertos productos que a la larga podrían ser muy perjudiciales.

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