DON DET (4000 islas), lugar para relajarse en Laos

A Don Det (4000 islas) llegamos desde Champasak por 60.000 kips (6 €). Con este precio se incluye la recogida en el guesthouse, cruzar el río y el autobús hasta Ban Nakasang. Una vez llegar allí hay que coger un barco para Don Det (15.000 kips, 1,5 €).

Donde para el bote en Don Det hay restaurantes y guesthouse, además de dos caminos que puedes seguir. Un camino hacia la parte este y otro en la parte oeste. Nosotros nos dirigimos por el camino este, y después de andar un rato elegimos el guesthouse Mama Mon por 40.000 kips (4 €) semi nuevo con baño privado, familia agradable y wifi en la zona del restaurante (aunque cuando llegamos el wifi no funcionaba, ni funcionó los dos días anteriores).

Hay numerosas cabañas para alojarse en Don Det. Los precios son parecidos, y varían si tienen baño privado o no. A nuestro parecer es mejor elegir el alojamiento en la parte este. Aunque puede ser bonito disfrutar de la puesta de sol en la parte oeste de la isla, el sol es muy fuerte y machaca mucho esta zona.

Alquilamos una bicicleta por 10.000 kips (1 €) y dimos la vuelta a la isla. Una vuelta completa se hace en menos de una hora. A medio camino pasamos un puente y entramos en la isla de Don Khon. Cuando llegamos no había nadie, pero a la vuelta nos dimos cuenta que pedían 20.000 kips (5 €) por entrar. Es el camino que hay que seguir para llegar a las cascadas de Don Det. Tres días antes murió un chico en esas cascadas. Fue a visitarlas en bicicleta con su novia, y decidió darse un bañito. Y desapareció. Se encontró el cuerpo a los tres días. Hay que tener cuidado. Como el sol pega muy fuerte aquí, decidimos parar a desayunar y dejamos el tema de la bici para la tarde, cuando hiciera más fresquito. Fue entonces cuando dimos otra agradable vuelta alrededor de la isla.

Nuestra impresión de Don Det es que apenas hay nada que hacer, y aunque son curiosas la cantidad de islas e islotes pequeños que hay, tampoco nos pareció un lugar tan idílico y paradisiaco como dicen en algunas guías. Quizá sea porque nos tocó la época en la que el río está de un color marrón y no apetece nada darse un baño, aún así había gente que lo hacía. Decían que en un mes el agua estaría más clara y será bastante más bonito el paisaje.

Entre las mejores excursiones que ofrecían en las agencias de la isla cabe destacar la excursión con kayak por 160.000 kips por persona (16 €).En esta excursión puedes bajar por el río en kayak, y se pueden visitar dos cascadas.

Para pasar la frontera y dirigirnos a Kratie (Camboya) decidimos hacerlo por nuestra cuenta. En las agencias de viajes de Don Det piden 18 dólares por persona para llevarte hasta Kratie. A las 7 y media de la mañana pasamos en barca hasta Ban Nakasang por 15.000 kips por persona (1,5 €), y desde allí fuimos en moto-taxi hasta la frontera por 20.000 kips por persona (2 €) tardando alrededor de 40 minutos. Para los vehículos las fronteras se abren a las 09:30 horas, pero como nosotros íbamos andando pudimos pasar enseguida. Primero para salir de Laos tenían que ponernos el sello de salida en el pasaporte, y por ello nos pidieron 2 dólares por sello, porque decían que como era fin de semana había que pagar esa cantidad. Pero sabíamos que ese dinero se lo quedaba el funcionario de turno. Aunque teníamos más dinero, le dijimos que no teníamos más que los dólares justos para sacarnos el visado de Camboya. Apareció entonces un superior que nos insistió en lo mismo, hasta que finalmente le dimos unos kips que nos quedaban (unos 12.000 kips, 1,2 €) y nos dejó pasar.

Ahora vendría el paso de Camboya, que ¿cómo no? también intentan sacar tajada. En primer lugar te paran a un lado de la carretera, en un lugar improvisado con una mesa y una silla. Nos dan un formulario para que lo rellenemos y después, con un aparatito, nos toman la temperatura del cuerpo. Nos piden un dólar por cabeza por hacer eso. Les decimos lo mismo que les habíamos dicho a los funcionarios de Laos, que sólo tenemos el dinero justo para sacarnos el visado. Después de charlar un buen rato, se dan por vencidos y nos indican el lugar donde finalmente nos darán el visado. Cuando llegamos nos dicen que el visado cuesta 25 dólares, cuando nosotros sabíamos que era 20 dólares. Así que otra vez preguntamos porque esa diferencia, y nos dicen que son las normas, y nos indican un papel donde lo pone, y que si no estamos de acuerdo cojamos nuestros pasaportes y nos vayamos de vuelta a Laos. Le pagamos los 25 dólares por persona y le pedimos el recibo. A pesar de que nos han dado los recibos no nos quedamos muy convencidos, en fin, que se le va a hacer.

Desde allí podíamos esperar un autobús que salía a las 12 del mediodía. Seguramente sería el autobús que recogería a todos aquellos que llegaban en autobús hasta la frontera y harían cambio de autobús aquí. Pero nos ofrecieron ir en minivan hasta Stung Treng por 5 dólares (3,75 €) y después coger otro minivan hasta Kratie por otros 5 dólares (3,75 €). Así pues ese fue nuestro primer transporte en Camboya, un tipo de transporte que intentaremos evitar en nuestra estancia en este país. Las furgonetas van llenas de gente y de cosas, además se pierde por caminos recogiendo a gente que tarda una eternidad en salir de sus casas, les da igual que la furgoneta esté esperando por ellos.