PATAN y su Plaza DURBAR en el corazón de Nepal

Cuando salimos de Pashupatinath nos dirigimos a Patan y para ello cogimos un taxi por 300 rupias (2,30 €).

Plaza Durbar de Patan

Lo que queríamos ver era la Plaza Durbar de Patán, así que paramos cerca de allí. Como no queríamos pagar la entrada de 500 rupias por persona (3,85 €), que es lo mismo que pagábamos por la habitación del hotel, dimos una vuelta por los alrededores y entramos por una calle que aunque había un puesto de tickets nadie nos dijo nada. Al igual que en la plaza Durbar de Katmandu nadie nos pidió el ticket y la cosa no estaba nada controlada. La plaza está bastante bien, algo más pequeña que la de Katmandú (que en realidad son tres plazas unidas), pero con algunos templos interesantes en las calles colindantes.

Entramos en el Golden Temple que valía 50 rupias (0,40 €), que por cierto tampoco pagamos porque nadie nos paró cuando entramos, y se trata de un antiguo y pequeño monasterio budista fundado en el siglo XII. También fuimos a ver una de las puertas de la ciudad, pero no es algo que merezca la pena. La entrada al museo de Patan costaba 150 rupias por persona (1,15 €) aunque no entramos y se encuentra en una parte del antiguo palacio que era la residencia de los antiguos reyes Malla.

El día estaba despejado y desde la plaza, sobre las montañas, se podían ver muy cerca los picos del Himalaya, unas moles impresionantes que parece que puedas tocar. Nos tomamos un par de tés en un restaurante de la plaza que tenía terraza y con buenas vistas, y allí nos juntamos con tres españoles que estaban viajando como nosotros y nos pusimos a charlar, como no.

Para volver a Thamel cogimos un tempo (Furgoneta de bancos corridos a los costados y con entrada por detrás) por 20 rupias por persona (0,15 €) que nos dejó en Ratnapark, y desde allí sólo hay que andar unos cinco minutos para llegar a Thamel. El taxi nos pedía de primeras 700 rupias (como abusan) (5,40 €), así que preguntando enseguida nos indicaron el tempo que debíamos coger.

Imágenes de Patan