HUE, antigua capital imperial llena de historia

Llegamos a Hue desde Hoi An, en un trayecto con autobús de alrededor de 4 horas y por 4 dólares (3 €). Llegamos sobre las 13:00 horas y el autobús nos dejó enfrente del hotel Google, en una zona donde hay bastante alojamiento económico. Cuando bajamos del autobús metieron todas las mochilas dentro del hotel Google, una buena manera de conseguir clientes. Nos ofrecieron habitación doble por 8 dólares por persona, o sea 16 dólares por la habitación. Cogimos las mochilas y salimos a buscar otra cosa más económica.

Muy cerca encontramos una calle, o callejón, con restaurantes y hoteles. Aquí nos quedamos en el hotel Phong Nha por 7 dólares la habitación (agua caliente, wifi, tv y ordenadores en recepción). Se encuentra muy cerca del puente Truong Tien y del río Perfume, en la calle Nguyen Tri Phuong. En este mismo callejón se encuentra el restaurante Nina´s Café, al final de la calle y algo escondido. Vimos que este restaurante siempre tenía gente cuando los otros lugares sólo tenían un par de mesas ocupadas, y además de suponer que estaría citado en algunas de las guías que suelen ser como biblias para muchos viajeros, había una mención especial en la página inglesa de wikitravel de Hue.

Que vimos en Hue

El mismo día que llegamos a Hue visitamos el mercado de Dong Da. Es un mercado donde se vende de todo, desde verduras, carne o pescado hasta ropa, sombreros e utensilios de cocina. Nos hizo mucha gracia, aunque resultaron un poco pesadas, varias mujeres que al preguntarnos de donde éramos nos dijeron en español “tu mirar mi tienda, cosas bonitas, tu subir y ver que guay”. Pensamos en decirles la próxima vez que éramos de Brasil, por ejemplo, a ver cómo nos los decían en portugués. No pudimos comprobar como lo hacían porque justo después no nos entró ninguna mujer.

Dentro del mercado hay varios puestos donde se puede comer, igual que había en el mercado de Hoi An, pero esta vez no los probamos porque no resultaron tan apetecibles. Cerca de este mercado hay un pequeño centro comercial donde hay un supermercado que puede resultar bastante práctico.

Cerca del río hay un paseo bastante agradable y al atardecer, entre los dos puentes, se colocan algunos puestos de comida.

Al día siguiente visitamos la Ciudadela de Hue. La zona amurallada es enorme, pero la zona de pago se puede recorrer tranquilamente en dos o tres horas, que es donde se encuentra entre otras cosas el palacio, la sala de coronación del emperador o la residencia de la madre del emperador. La entrada cuesta 105.000 dongs (5,25 €), casi el doble de lo que costaba hace un año según nuestra guía, así que en un principio no entramos y nos pusimos a andar alrededor de la muralla interior, la que rodea la zona del palacio. Muy pronto encontramos otra entrada que daba a un bar-restaurante, pasamos y desde allí vimos que había un paso cortado por una simple valla. Coincidimos con un lugareño que nos miró, se rió, y se coló por la valla. Como no, nosotros hicimos lo mismo, y ya estábamos dentro.

Visitando la Ciudadela te das cuenta de lo que pudo haber sido este lugar, pero la verdad es que se encuentra bastante descuidado. Es algo que nos sorprende porque los jardines, los numerosos bonsáis y la hierba recién cortadita están bastante bien, pero los edificios no reciben demasiada atención, o no toda la que merecen.

La visita consiste en ver los pocos edificios que quedan en pie, los cuales se encuentran a cierta distancia uno de otros, y cuyos interiores se encuentran en la mayoría de los casos vacíos. A pesar de ello los interiores de alguno de esos edificios son interesantes y todavía se mantiene algún mobiliario.

Nuestro siguiente destino es Nih Binh por lo que cogimos los tickets de autobús por 270.000 dongs (13,5 €). Hay que preguntar en varias agencias ya que la mayoría piden mínimo 300.000 dongs. El trayecto dura unas 12 horas y sale a las 4 y media de la tarde, por lo que llegaremos al amanecer del día siguiente.

Imágenes de Hué